3 Métodos con distintos resultados.
La forma como consumimos el cannabis tiene un efecto importante en el tipo y duración del “high” o colocon que experimentan los consumidores. Los 3 métodos más comunes son fumar, comer o inhalar. A continuación analizaremos sus diferencias.
Tanto fumar como inhalar cannabis funcionan con el mismo principio. Se calienta el cannabis o aceite de cannabis y se aspira el humo o vapor. De esta manera el THC y otros componentes se absorben rápidamente por el cuerpo humano y su efecto puede sentirse en pocos minutos.
Aunque fumar e inhalar parezcan similares
Hay unas diferencias considerables. Al fumar marihuana se quema la planta a temperaturas cercanas a los 900ºC. En cambio al vaporizar se alcanzan temperaturas entre 160º y 230º, sin llegar a quemarla.
El humo del cannabis es mas irritante para la garganta y los pulmones, incrementando el riesgo de bronquitis u otras condiciones. Inhalar el vapor de la marihuana es probablemente la vía más sana para consumir cannabis, aunque el efecto es menor que cuando se fuma. Esto se debe al conjunto de químicos y cannabinoides que se mezclan al quemar la planta.
Comer Cannabis, es otra cosa…
Por otro lado, comer cannabis tanto en dulces, galletas o bebidas tiene otro tipo de efecto.
El aceite del cannabis no es soluble en agua, por lo que debe prepararse acompañado de alguna grasa o alcohol. La mantequilla es el medio más usado en la preparación de brownies y tartas con cannabis.
Al ingerirlo los efectos tardan más tiempo en aparecer, incluso varias horas. Si se consumen con el estomago vacío el efecto es un poco más rápido. Así como los efectos tardan en aparecer, también tardan en desaparecer. El ‘High’ se puede extender por varias horas.
Según tu experiencia ¿Cuál es tu método preferido? Coméntanos.