Una de las cosas que más se comenta entre la comunidad cannábica es como la marihuana puede mejorar la vida sexual. Las anécdotas van desde tener los sentidos más activos hasta mejor relajación o perdida de nervios, una herramienta para elevar la experiencia a otro nivel. Pero ¿Qué hay de cierto es esto?
Un estudio publicado por el Journal of Sexual Medicine arrojó datos científicos sobre como están ligados la marihuana y los orgasmos.
El cuerpo humano posee un sistema denominado Sistema Endocannabinoide. Este sistema cuenta con receptores de químicos especiales tanto creados por el cuerpo como obtenidos a través de ciertas plantas, como el cannabis.
El sistema Endocannabinoide se divide en dos tipos: El CB1 el cual es activado principalmente por un químico llamado Anandamida y el CB2 que se activa entre otros por un químico llamado 2-AG. El CB1 se encuentra principalmente en el cerebro y la espina dorsal, mientras que el CB2 se encuentra distribuido en los órganos del cuerpo.
Cuando los receptores de CB1 se activan sentimos placer. Es una sensación similar a la que experimentan los corredores y runners, la llamada “runners high”. Es una sensación de placer y bienestar que recorre el cerebro y la espalda, se debe al flujo de anandamida que genera el cuerpo durante esa actividad física. Lo mismo ocurre con el THC, ya que copia la función de la anandamida, se une a los receptores y libera una señal de placer incluso mayor que la experimentada por los corredores. Este proceso químico lo experimentamos como el High o Colocón.
Por otro lado, el CB2 y el químico 2-AG tienen un rol importante en la respuesta sexual y el orgasmo. Según la publicación del Journal of Sexual Medicine, otros 2 estudios realizados a hombres y mujeres al momento del orgasmo reveló que habían altos niveles de 2-AG pero bajos niveles de anandamida.
Aquí es donde entra en juego el cannabis
El THC activa receptores tanto CB1 como CB2, por lo que genera respuestas de placer en todo el sistema endocannabinoide. Es importante resaltar que cuando el THC se conecta con un receptor prohíbe la entrada de otro endocannabinoide, así que existe la posibilidad de que mucho THC pueda prohibir la conexión del 2-AG y frenar la respuesta sexual. El CBD en cambio, parece no conectar con receptores CB1 ó CB2, pero sí incrementa los niveles de 2-AG en el cuerpo humano. Por lo que aumentaría la cantidad de químicos que generan una respuesta sexual de manera natural.
Podemos llegar la conclusión de que con moderación el cannabis puede ser una gran herramienta para mejorar la vida sexual. Lo idea sería buscar una combinación de THC y CBD que vaya acorde a nuestra química y aprender a sacarle ventana a otra propiedad más que interesante que tiene el cannabis.